domingo, 12 de febrero de 2012

La ola polar y los tres cuartos de piel de oso.


Frío.
Es de las pocas cosas en las que uno puede pensar un día como este.
Hace frío.         
   
Me acompañan las almas cálidas y las notas de música, inundando un salón raro y ambientando extrañas personas.
Ahora es allí fuera donde hace frio.
Y mis manos frías ya rompen este aire calmado.
Y esto sonando de fondo...



En estos tiempos de frio, ¿Qué mejor prenda podemos calzarnos que un Barbour tres cuartos clásico?

Se me crea en la mente una imagen: un muchacho joven llegando por la mañana en el colegio con un buen refrigerio para el recreo, un zarandeo para rodearle con el abrigo y un beso con el  pertinente enmarañamiento de la melena.

Aunque también me evoca a paseos en las campas de la Sierra de Aralar…hace más de 30 años. Rifle bajo el brazo, boina calada hasta los ojos, el pelo húmedo, barro en las perneras…aunque esta es otra historia y será contada en otro momento.

Hoy hablaré sobre la que considero una de las mejores prendas para el invierno madrileño, el Barbour. Esta marca puede fardar de una distribución histórica. Su historia se remonta a 1984 cuando John Barbour, un escocés que se instaló en el noreste de Inglaterra para probar suerte como viajante de telas abrió su primera tienda en Market Place, South Fields. Lo demás, es historia.

La venta de esta prenda siempre se ha caracterizado por un precio de "elevado cumplimiento"(perdiéndole el respeto a clasificar como caros y baratos los productos y servicios), llegando a oscilar entre los 200 y 500 euros dependiendo del modelo que selecciones.

Quizás pierda un poco la perspectiva, pero como esto es un blog público y personal me tomo la licencia de admirar y alabar tal prenda. Propietario como soy de un barbour de tres cuartos puedo aportar mi vivencia en primera persona.

Pura calidez, comodidad y garantía. Dicen que son prendas que manteniendo un correcto cuidado de las mismas pueden llegar a durar hasta 30 años. Hasta cuentas con la posibilidad de mandar tu barbour para que lo engrasen a su fabrica principal en la localidad inglesa de South Fields, donde tardarán como mucho dos semanas en traértelo de vuelta a casa en perfecto estado para poder aguantar un invierno más de la mano del mejor abrigo del mundo.

Por no perder la línea editorial de la que me he de convertir en profeta, os adjunto un link para que podáis admirar el catalogo más extenso que Barbour España tiene en internet, Barbour Victoria, con una nueva colección Steve McQueen.


Esta es una foto del Barbour del que soy propietario, útil para todo tipo de ambientes y climas.
(abstenerse comentarios respecto al modelo, que uno tampoco es profesional).

Un saludo, 
Little Blues.

¿volveré?

Volví una vez.


2 comentarios:

  1. has salido muy bien. Enhorabuena por el post

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  2. Uno que se conserva todavía joven...gracias por la apreciación, ambas de ellas...seguramente cuelgue el siguiente esta noche, filosofía de sonrisas. gustará.

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